domingo, 23 de agosto de 2015

El lado difícil de la Medicina

Al menos 100 médicos cubanos, muchos de los cuales desertaron de misiones humanitarias en Venezuela, protestaron el sábado luego de pasar meses varados en Bogotá a la espera de que Estados Unidos les otorgue una visa especial.

Algunos de los profesionales de la salud temen que el retraso en el trámite de sus solicitudes de visado, en virtud de un programa del gobierno estadounidense creado en 2006 para atraer el talento médico de Cuba, sea una señal de que el presidente Barack Obama pretende acabar con el incentivo como parte de las medidas para restablecer las relaciones con la isla comunista.

Los médicos salieron de Cuba para unirse a misiones en diferentes países, sobre todo a la venezolana "Barrio Adentro" —un programa creado por el fallecido presidente Hugo Chávez para atender a las poblaciones más deprimidas. Pero pronto se hastiaron de los problemas de seguridad de ese país y de la profunda crisis económica que se expresa en la escasez de productos alimenticios y de aseo. Cruzaron la frontera y viajaron a Bogotá.

Vistiendo batas blancas y luciendo sus títulos profesionales, los médicos se reunieron para presionar por una respuesta estadounidense en un parque del barrio Kennedy, un sector obrero de Bogotá construido en la década de 1960 con dinero de la Alianza John F. Kennedy para el Progreso.

"Estamos en Colombia en condición irregular. Estamos en el limbo: sin trabajo, con poco dinero y con el tiempo al límite", afirmó la odontóloga Ailén García, de 25 años y con siete meses de embarazo, en entrevista con The Associated Press.

"Mi preocupación es mi bebé. ¿Dónde voy a parir y en qué condiciones?, preguntó García, quien junto a su esposo vive desde hace seis meses en una pequeña habitación en el oeste de Bogotá y por la cual pagan unos 200 dólares mensuales.

Aunque reconocen las comodidades que Colombia ofrece en comparación con otros países, los médicos cuentan que han tenido que sobrevivir con una sola comida al día y pedir dinero prestado para cubrir sus gastos.

Discel Rodríguez, un enfermero de 41 años, dejó la provincia de Granma, Cuba, para buscar mejores condiciones laborales y de vida en Venezuela a donde arribó en enero de 2014. No aguantó, empero, con un pago mensual de 20 dólares.

"Llegué a Bogotá confiado del programa de Estados Unidos. Ya han pasado siete meses y no hay respuesta... desde enero para acá, el programa se ha venido poniendo más tortuoso", destaca Rodríguez quien atribuye la dilación a la nueva era diplomática entre Cuba y el país del norte.

El Programa estadounidense de médicos está diseñado para privar al gobierno del presidente Raúl Castro de una importante fuente de ingresos extranjeros. Cuba nunca ha especificado cuánto paga a sus médicos en misiones foráneas, que ya enrolan a más de 50.000 profesionales en unos 66 países.


Cuatrillizos en Alemania

Una alemana de 65 años, madre ya de 13 hijos y profesora de ruso e inglés, ha tenido cuatrillizos en un hospital de Berlín. La madre, identificada como Annegret Raunigk y abuela de siete nietos, ha tenido a sus hijos por cesárea tras un embarazo de 26 semanas.

Los cuatrillizos -una niña y tres niños- han pesado entre 960 y 655 gramos y han medido al nacer entre 32,5 y 30 centímetros y, como es habitual en partos prematuros, están en incubadoras.

Raunigk se sometió durante el último año y medio a varios tratamientos de implantación de óvulos por inseminación artificial fuera de Alemania (en Ucrania), donde está prohibida para una mujer de su edad, después de que una de sus hijas, Lelia que tiene actualmente nueve años, le expresara el deseo de tener un nuevo hermano.

Las posibilidades de supervivencia de cuatrillizos nacidos tras un embarazo de 26 semanas es bastante alta aunque no se pueden descartar complicaciones. Sin inseminación artificial, las posibilidades de tener cuatrillizos se estima en 1 entre 600.000

Tres meses después de su nacimiento, los cuatrillizos hiper prematuros han abandonado el hospital y se encuentran en su casa, anunció este jueves el Hospital de la Caridad de Berlín.

"Cuando los hiper prematuros se acercan a la fecha de parto inicialmente prevista, es el momento para que dejen el hospital", explicó el Jefe del Servicio de Neonatología de esa casa de salud, Christoph Bührer, precisando que con "frecuencia vuelven al hogar antes de esta fecha".

Los tres varones, Dries, Bence y Fjonn, así como su hermana Neeta pesan actualmente más de 2,5 kilogramos cada uno.

No obstante, deberán visitar el hospital regularmente para someterse a exámenes de seguimiento.

La cadena de televisión RTL, que realiza varias emisiones de tipo  'reality-show', "siguió" este embarazo poco común como si se tratara de una telenovela, obteniendo en exclusiva entrevistas e imágenes de la madre y sus bebés. El monto del contrato firmado por ésta con la empresa no fue revelado.

Este caso extraordinario había provocado un vivo debate en Alemania, donde mucha gente le reprocha su falta de responsabilidad.

En abril, Raunigk rechazó las críticas afirmando que es derecho de cada uno decidir el momento para procrear. "Los niños me permiten mantenerme joven", había argumentado entonces.